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sábado, 13 de febrero de 2010

PAGUE CARA MI FANTASIA

Mi fantasía era ver a mi mujer culpando con otro hombre, no sé por qué, pero me excitaba mucho imaginarla culeando mientras yo miraba. Una noche, estábamos tomando un trago en Bunker y le propuse de invitar a alguien, ella había bebido mucho y de repente me dice: “ok, ¿realmente quieres verme con otro hombre?”, pongo una sola condición. Pase lo que pase, no me juzgaras, no hablarás si no te lo pido y harás exactamente lo que yo diga, OK?” Contesté, ella se paró y fue a la barra hablo con un tipo y lo tomó del brazo acercándose hacia mí, cuando estaban cerca, me dijo, paga y síguenos. Yo me sentí un estúpido mientras pagaba la cuenta. Al llegar a nuestra casa se abalanzaron sobre la cama. Yo miraba a mi mujer siendo desvestida por este hombre, sus tetas quedaron al aire rápidamente, él las tomó y jugó con ellas, pasó su lengua por su vientre, llegó al calzón y como si no hubieran estado allí los arrancó y se hundió en su vagina. Yo estaba calentísimo, quería participar, masturbarme, pero no quería interrumpir, ya que ella estaba pasándolo muy bien al parecer. Ella lo desnudo a el, volteo y me llamó y me dijo agáchate, ¿para qué?, atiné a preguntar, cuando sentí una cachetada en mi cara y dijo, no se habla ni se pregunta sin mi permiso. Durante años quisiste ser un esclavo, querías ser feliz porque yo culeaba con otros. Hoy te daré ese regalo, pero no quiero volver a oír que preguntas algo. A tu ama se le sirve, se le escucha y se le da placer como ella quiera, ¿está claro?. Yo respondí que si, y me dijo quiero que se lo limpies bien, quiero metérmelo cuando esté limpio y oloroso. Eso era mucho, una cosa era que culeara, pero otra, que terminara limpiando el pene que entraría en mi mujer, así que empecé a hablar y me llegó un golpe en la parte de atrás de la cabeza, empujándome contra él. Ella se rió y me dijo, no sé si te queda claro que es mejor que hoy te des cuenta que eres un esclavo y que solo servirás para hacer lo que yo quiera. Ahora quiero que lo limpies bien y con la boca. El morbo pudo más, lo tomé con mis manos y Empecé pasándole la lengua en la parte por el palo, fue extrañísimo, era un hombre y lo estaba chupando, y me estaba gustando. Sentí un sabor salado y dulce al mismo tiempo, sentí algo viscoso que supuse que era líquido seminal y me metí la cabeza completa a la boca. Empecé a chuparlo como me gustaba que lo hicieran conmigo, tomé sus testículos y empecé a masajearlos. Sentí mi boca inundada por ese pene, de repente me golpearon la cabeza, No te ordené que lo mamaras, sino que lo limpiaras. Me sentí muy avergonzado, ella tenía razón, ella lo tiró a la cama y se metió su verga hasta el fondo de la concha ella iba gimiendo y decía, así se siente con un hombre de verdad, nunca había tenido una tan rica taladrándome la concha, Ella estaba gozando y me dejaba mirarla, que más se podía pedir. Estuvieron así cerca de cinco minutos y yo miraba parado en una esquina. Pasado ese rato, ella se puso en cuatro patas y le pidió que se lo metiera por el culo. Yo di un salto, porque yo solo había podido desfrutar de su culo tres o cuatro veces, y a él se lo entregaba a la primera. Él se mojó los dedos en sus jugos y empezó a meterle uno y luego dos, ella gemía como una condenada mientras le metían los dedos por el culo y el pene por la concha. En un movimiento, luego se lo metió directo en su culo, ella dio un gran grito de dolor, pero rápidamente empezó a seguir el ritmo con que la estaban bombeando y le decía que le diera fuerte, que quería sentirlo hasta el fondo de sus entrañas. A los tres minutos, ella empezó a gemir y tuvo un orgasmo increíble, el siguió penetrándola y ella se voltio hacia mi y dijo te doy el honor de comértela, yo sin dudar tomé ese pene y empecé a mamar como si fuera un helado, hasta que el eyaculó en mi boca, ella puso cara de pícara y me dijo “¿era eso lo que querías?”

1 comentario:

  1. este man es una porqueria, porque no puso los nombres y el barrio para saber de ese perro

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